26 de octubre de 2010

Paquete sin abrir

Hoy me rondó una idea por la cabeza todo el día: siento que entrego el corazón, y me devuelven el paquete cerrado. Y que de tanto ir y venir, se va a ir gastando. Ya se está gastando, creo. Así se siente, hace tiempo. Y todavía no cambió. Uno siempre piensa que la culpa es propia, pero a veces también es de los demás, pero igualmente vas a seguir sintiendo que es tuya, porque solamente vos pudiste haber hecho algo mal, y le buscás la vuelta para que así sea, para que vos tengas la culpa y no el otro, y llorando te preguntás que fue aquello que no hiciste y no encontrás respuesta, o lo peor de todo, te inventás una.
Y pasan las semanas y la vida sigue y todos siguen su camino y vos también tenés que seguirlo porque el tiempo no va a parar porque vos querés que pare y tomar un respiro, volver a respirar. Sentís que te ahogás en el agua, esa agua que cae de tus ojos, pero otra vez amanece e igualmente te levantás, te preparás el desayuno y seguís estudiando. Tratás de pensar en otras cosas pero te resulta imposible, el corazón ya te lo devolvieron sin abrir, lo recibiste y ahí quedó, arrumbado en el estante de tu habitación. Entonces te preguntás que es lo que pasó, y nadie te lo va a responder. La pregunta va a quedar resonando como el eco, en tu cabeza, y nadie la va a responder.

¿Donde quedó el romanticismo? ¿Donde quedaron las ganas de recibir un abrazo que te haga sentir protegida, que nada malo te puede pasar si estás con sus brazos alrededor? Me pregunto si ahora dejó significar algo el que estés al lado de alguien solo para agarrarle la mano y sepa que estás ahí, si un llamado para saber cómo está sirve para algo, si preguntarle si está bien tiene un significado.
Pareciera que hubiera desaparecido la seducción, el ver un poco más allá de la apariencia física. Un poco mas allá de si tiene un buen culo o no. Que se pueda hablar de lo que sea, que puedas compartir gustos o discutir si esto es mejor que aquello. Sólo digo que para mi se está perdiendo. Se está perdiendo el conocerse, el disfrutar del otro, el robarle un beso, el compartir las cucharadas de helado, el cocinarle algo... Seguramente me digan que no es así. A mi me encantaría que me refutaran esta entrada.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me hiciste acordar a un post mio, espero te sirva...



Cada uno de nosotros posee su propia interpretación de lo que es el amor, de cómo se debe vivir, de cómo se debe sentir, de cómo se debe llamar, de qué color debe tener, de cómo debe sonar, de qué forma debe ser, de lo que tiene que tener siempre y de lo que no tiene que tener nunca. El amor es una interpretación personal y eso es libertad.

Tenemos que confiar siempre en nuestra interpretación y defenderla ante las demás, porque el amor está en la persona que lo interpreta igual que nosotros.

Y cuando dos personas poseen la misma manera de interpretar al amor, se enamoran. Se crea una nueva y única definición del amor. Solo ellos entienden cuando hablan de amor, como dos cómplices. Nunca hubo algo igual, ni lo habrá.

Es el amor según ellos dos. Crean el amor. Lo hacen desde cero…hacen el amor.



saludos!

Corita dijo...

YO REFUTO!

Yo, que dije 'tengo el cariño mutilado' porque así lo sentí por años... refuto.

Ojalá hoy, a meses de esta entrada, hayas cambiado de idea, o al menos, la hayas quitado de en medio para darle espacio a lo que vendrá ;)