1 de diciembre de 2010

Hoy te cocino todo

Feliz, feliz, feliz. De que hayan pasado los nervios, esa angustia y temor y ganas de llorar que no me abandonaron ni ayer a la noche ni hoy a la mañana. De haber ido a una entrevista en la juguetería Cebra, que creo que me fue bien, temporario por las fiestas, pero quién dice, quizás me llamen...(Ojalá, ojalá, ojalá). De que nos hayan (seguro) puesto una buena nota hoy en el examen final de cocina. El profesor al principio se hizo el serio, el malo, tenía una cara que se la pisaba y probaba todo haciéndose el testeador de bocados profesional pero después de un rato se le pasó y volvió a ser el mismo de siempre. De haber llegado con el tiempo para presentar el plato, a mi me había tocado una entrada para las 16:30 hs cuando la clase empieza a las 15:30, aunque nunca empieza a esa hora... Dije, en esta no llego ni colgándome del horno, pero por suerte nosécomocaracho me organicé de manera que llegué cinco minutos tarde nomás. Estoy feliz porque hoy mas allá del cansancio que tengo y del dolor de pies, fue un día útil, fue un día en el me sentí capaz de poder hacer cosas. Que no me sentí una inútil o fracasada, o medio tarada, de todo me creo con tal de darme de palos una y otra vez.

Así que hoy puedo decir que fue un muy buen día.
Mañana, otra entrevista más.

No hay comentarios: