26 de noviembre de 2010

Un final y una entrevista

Esta mañana salió como para tirarle tomates por haber desafinado tanto. Ya de por sí mi humor por tener que soportar a la de Políticas Educativas era de lo peor, encima la muy linda señora me mandó a final. Con un seis. Un desastre. Todo el cuatrimestre tratando de remarla con esa materia y me fue como el traste. Le quise poner onda y no me salió. Le quise estrechar la mano y que hiciéramos la paces, que nos amigáramos, que las políticas educativas a fin de cuentas no son tan aburridas como parecen, pero ellas y yo no podíamos. Y seguimos sin poder, hasta que el diez de diciembre rinda el final y ahí si quedará sellada o no nuestra relación.
Así que después de cursar tenía una entrevista de trabajo a las doce y media del mediodía. Salí a la una menos diez. Entre malas palabras, la despedida de un compañero colgado, mientras le decía yotepasolasfechasdefinal y malas palabras dichas entre dientes, llamé a la empresa pidiendo disculpas por no haberme presentado, y a que no saben qué! Me atiende muy amable la secretaria y me dice que no hay problema, vení igual. Me mandé muy contenta hasta Callao y Av. Alvear. Bueno, me sentí como sapo de otro pozo realmente. Me pregunto cada vez que paso por esa zona de la ciudad cómo es que hay gente todavía en el país de tener ese poder adquisitivo, de armarse la burbuja que el dinero permite. Es como ir a Puerto Madero, mas o menos, pero como tiene verde, quizás no se note tanto... La casa era Cardon, esa que vende cosas de equitación creo, ropa de cuero, blablabla, un chetada, con perdón de alguno que lea y se ofenda. Más sapo de otro pozo me sentía al entrar al negocio, y después en la entrevista. Y, entrando en lo que es la entrevista, fue un desastre! La flaca que me la hizo no me dio ni bola, está bien que fui tarde, pero me hubiese dicho que no podía atenderme... Muy amable igual, pero la verdad que se la pasó mirando el teléfono, respondiéndolo, me explicó así nomás lo que era el trabajo, me preguntó los datos... El problema era me parece que no encajaba en el perfil. Que me llamaron por la edad, y porque vivo en un barrio de gente con dinero. Unos boludos totales. Esperaban una chica Paula Cahen D' Anvers y se encontraron con una que tiene un pantalón hace tres años!

1 comentario:

Co dijo...

Jajaja, mi hiciste reir Lulú. Hay gente pelotuda como ésa en todos lados. No des bola y adelante con las entrevistas! De a poco te vas curtiendo y ya vas a conseguir algo copado!

Besos!