15 de diciembre de 2010

Algo nuevo

Siempre pienso en entrar a mi blog y escribir algo poético, algo que diga que me sedujo la belleza de la buena onda que tenía tal o cual persona, o la sonrisa del morocho que viajaba en el subte conmigo, o la manera tan sutil que tenías de tenerme a tus pies. Pero no, llego acá y lo único que me sale son quejas, o catarsis de los miedos que me acompañan todos los días, aquellos que llevo conmigo adonde vaya, porque por mas que se achiquen, siguen estando ahí.
Ahora estoy trabajando en este nuevo lugar (una juguetería) y la verdad que con eso vinieron bastantes cambios que se dieron juntos, lo principal que puedo decir es que estoy reventada. Comparado con este trajín mi vida fue una nube. Suave y super algodonada. Ahora tengo que subir y bajar al depósito cajas que pesan bocha, subir y bajar de las estanterías juguetes que sabés que no van a entrar en ningún lado del local, saber los nombres aquellos que ni sabía que existían, disfrutar de la poca simpatía de los clientes, de otros que te miran como si fueras un monstruo que obliga a que compres cosas, otros que te tienen dos horas mostrándoles cosas que al final no compran, y otros que con la buena onda que traen te alegraron el día. La otra vez una chica me dice gracias por la buena onda y eso ya me puso ultra feliz.
Pero bueno, como todo trabajo, tiene de todo, el problema para mi, es acostumbrarme a todo eso. A salir de esta casa y enfrentar el mundo que me rodea, que es hermoso, y lleno de nuevas cosas a la vuelta de la esquina, que tiene de todo para ofrecerme y de lo que puedo tomar lo que quiera. Lleno de colores, y con grises también, pero está ahí para tocarlo, disfrutarlo y moverlo a la manera que nosotros queramos. No pretendo ser de los que salen a escalar el Aconcagua, pero solo con perder un poco del miedo que le tengo a todo, me sentiría muchísimo mejor. No tener que estar pensando las cosas unas dos mil novecientas veces antes de hacerlas, y decidirme cuando ya se me pasó el tren.

1 comentario:

Co dijo...

Y bueno Lulú, si es lo que te sale, te sale. Nadie te está exigiendo lo contrario. Cada uno usa su blog para lo que lo necesita, y si eso significa quejarte y hacer catarsis adelante!
A veces es bueno sentirse agotado, al menos nos ayuda a no pensar pavadas, no?

Besos